miércoles, 11 de marzo de 2009

LEALES CON EL CELSO



Estamos en una obra que nada ni nadie podrá detener. Ya he tenido oportunidad de decir, ¡dentificada con el líder, que el peronismo no se aprende ni se proclama. se comprende y se siente. Por eso es convicción y es fe. Por eso, también, no importan los rezagados del despertar nacional. yo no deseo, no quiero para el peronismo, a los ciudadanos sin mística revolucionaria. Que no se incorporen, que queden rezagados, si no están convencidos. El que ingrese, que vuelque su cabeza y su corazón sin retaceos, para afrontar nuestras luchas, que siempre habrán de terminar en un glorioso 17 de Octubre. Pero en nuestro movimiento no tiene cabida el interés y el cálculo. Marchamos con la conciencia hecha justicia que reclama la humanidad de nuestros días.
Peronismo es la fe popular hecha partido en torno a una causa de esperanza que faltaba en la Patria.
Hace poco tiempo, para definir mi condición de peronista, expresé: "Luchamos por la Independencia y la soberanía de la Patria, por la dignidad de nuestros hijos y de nuestros padres, por el honor de una bandera, por la felicidad de un pueblo encamecido y sacrificado en aras de una avaricia y un egoísmo que no nos han traído sino dolores y luchas estériles y destructivas".
Si el pueblo fuera feliz y la Patria grande, ser peronista sería un derecho. En nuestros días, ser peronista es un deber. Por eso soy peronista.
EVITA
CELSO TE BANCAMOS A MUERTE